Soy un virus, Enrique Symns
"Conozco el dolor desde niño, cuando bajaba corriendo afiebrado hacia la costa de las aventuras y me encontraba siempre con esa cárcel de rutinas en que consiste la vida. Porque estamos aquí, en donde todo es dolor y todo nos resulta gratis, porque el sol se quema todos los días como un bonzo que se suicida por tristeza. En dónde las sonrisas terminan siempre en puñaladas y en dónde el primer pez cuando tuvo hambre se convirtió en asesino. El dolor de estar aquí, en donde los pájaros aprenden a leer y a escribir las leyes que prohíben volar.
Esos viejos flacos y orgullosos en el
supermercado, arrastrando un carrito vacío con los ojos bajos y en silencio.
Porque ellos creen que el silencio es de bravos. Esos viejos muertos de hambre,
que trabajaron toda la vida y no se roban ni una uva. Esos viejos que se cruzan
con un muchacho rubio de pelo largo que no los ve, porque va pensando en el
futuro. Porque este es un mundo de jóvenes que olvidan su orígen y de viejos
que no recuerdan el destino.
Pero si las moscas usaran corbata, si las
balas cantaran blues, si el cielo sacudiera su viejo culo azul y las ventanas
católicas de los edificios explotaran; igual...Igual habría un anciano babeando
fantasías sobre las piernas de una muchacha. Igual habría todos esos tipos con
caras de clavo sonriendo por las calles del mundo.
Un hombre solo en un cuarto regando una
planta. Sufriendo porque nadie le habla o nadie lo toca y sólo le cabe
recordar. O las camareras de los bares nocturnos de polleras cortas que van
naufragando entre las brumas del deseo. O las conversaciones de mis amigos que
antes soñaban ser héroes y ahora cobran un sueldo. Están inyectando la jeringa
del miedo en las venas del mundo.
Yo tenía veinte años y siempre estaba
borracho en una pieza mugrienta. Viendo reflejar mi rostro sobre las paredes
del mundo. Ahora tengo casi sesenta...y nunca lo vi...
Nunca vi a un hombre encendido y llameante,
un hombre que cuando levantara la mano para encender un cigarrillo yo viera en
sus ojos los ojos de un tigre acechando en el viento el paso del tiempo, para
matarlo. Siempre vi los ojos del miedo....
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